Manuel Viera Flores, CEO & Managing Partner, Metaproject Group.
Prioridad de industrializar el litio, declaración de mineral estratégico para el país, así como el impacto del panorama internacional en los recursos para la electromovilidad, fueron los temas que abordó el reconocido profesional.
Con una larga trayectoria en el sector minero desde varios frentes, a través del mundo empresarial, académico y profesional, Manuel Viera expuso los temas que ocupan la agenda en torno al litio, iniciando con el panorama actual, que, a su juicio, incide en el desarrollo del mineral blanco, como, por ejemplo, el cambio climático y su impacto; también la guerras y conflictos bélicos en el mundo, el aumento de la demanda de minerales críticos por la electromovilidad, entre otros.
En la misma línea, Viera recordó que la Agencia Internacional de Energía ha dicho que los minerales críticos como el cobre, el litio, níquel, cobalto y los elementos de tierras raras son componentes esenciales en muchas de las tecnologías de transición energética de rápido crecimiento de la actualidad.
Junto con ello, argumentó que el litio proveniente de Chile y de Australia tienen una preferencia por sobre otros países por parte de Estados Unidos, para ser incorporado en baterías fabricadas en ese país.
Recordó, además, que los mayores productores del material blanco lo encabezan Australia (61.000 toneladas) y Chile (39.000 toneladas). Viera complementó su alocución con otro dato, respecto de la demanda de litio compuesto al 2030: el mundo demandará 42% de carbonato y 57% de hidróxido.
Con respecto a las capacidades del mineral en Chile, el profesional sostuvo que las reservas de Chile corresponden a las salmueras del Salar de Atacama, calculadas en 9 millones de toneladas de Li, y acotó que la cifra no incluye otros salares. Apuntó que en Chile se encuentran recursos de litio en aguas termales y en algunos depósitos sedimentarios como el derivado de mica. El 66 % de estas reservas corresponden a salmueras de salares.
Sin embrago, Viera esgrimió un pero, y es que Chile tiene restricciones para la inversión extranjera directa por declarar (al litio) como un recurso estratégico para el Estado.
En cuanto a las oportunidades, resaltó que el mineral no metálico ofrece muy buenas expectativas a través de Perú, Chile, Argentina, Bolivia y México, debido a las señales existentes: partiendo por los cuatro países sudamericanos que cuentan con casi el 80% del litio. Esas señales son, entre otras, que los vehículos eléctricos seguirán aumentando; China producirá este año 6 millones de estas unidades. Otro dato que entregó es que el precio del carbonato de litio alcanzó máximos históricos de 550.0000 yuanes, aproximadamente, 71.400 US$/ton. O que se estima que la demanda del litio va a aumentar 40 veces para el 2040, seguido del grafito, el cobalto y el níquel (que se estima crecerán de 20 a 25 veces).
AMENAZAS
Sin embargo, Viera habló también de las amenazas que tiene Chile en la materia, como, por ejemplo: en Canadá el yacimiento provincia de Manitoba generará producción de 160.000ton/año de litio para Tesla, Ford, LG Chen, Panasonic. O, que en países de Europa hay 27 grandes yacimientos de litio en República Checa, Serbia, Ucrania, España, Francia, Portugal, Alemania, Austria, y Finlandia; así también lo es el peligro de que se sustituya el mineral blanco (para ello habló de las investigaciones que se están haciendo con otro tipo de baterías), y que el boom del litio puede tener una vida útil entre 15 a 20 años; también incluyó en este recuento el fantasma de la nacionalización del mineral, citando como ejemplo el caso de México.
Con todo lo anterior, en su siguiente lámina Viera habló de por qué Chile debe fomentar la inversión para aumentar su producción de litio. Sobre ello, argumentó que hay que derogar urgente los artículos 7,8, y 9 del código de minería que declara que solo el Estado puede explotar el litio; enfatizó, además, que solo el litio generó para el Estado US$5.000 millones en 2022, mucho más que la minería del cobre. Puntualizó que el “oro blanco” es una excelente fuente de ingresos para el Estado, “solo si se hacen bien las cosas”, es decir, atraer inversiones, fomentar la inversión privada, aumentar la producción con sentido planetario. Para Viera “solo fomentando la inversión habrá crecimiento”.
A lo anterior, el catedrático sostuvo en su presentación que “el litio y el cobre deben declarase como minerales de seguridad nacional por el impacto estratégico en nuestra economía”. Para ello, argumentó que Canadá ya habló de ello de declarar el litio y otros minerales como de seguridad nacional.
Respecto de los países de la competencia, dijo que Argentina se está convirtiendo en un jugador clave en la producción de litio y está aumentando sus inversiones en la industria para aprovechar el crecimiento del mercado de baterías, que posee más de 18 proyectos y que al 2030 superará a Chile en producción.
CONCLUSIONES
Para Manuel Viera, los puntos importantes para que Chile aproveche las ventajas del litio son, entre otros: “derogar los artículos 7, 8 y 9 donde se declara el litio como mineral estratégico y reservado solo para el Estado”. Y agregó, que “hay que apoyar que se deroguen las modificaciones al código de minería introducidas por ley 21.420, suspendidas temporalmente hasta 31 de diciembre”.
Habló de perfeccionar un modelo de negocios mediante una alianza público-privada con dignidad sustentable.
Priorizar al inversionista que agregue valor a la materia prima, es decir, que industrialice al litio y genere empleos, divisas y sustituya importaciones.
Indicó el pago de un royalty mediante el punto de equilibrio donde el Estado maximiza su recaudación fiscal y el privado tenga una rentabilidad justa. Y, por último, aplicar depletion o factor de agotamiento.
Finalmente, en su presentación, Manuel Viera concluyó que el litio y el cobre son minerales críticos para enfrentar el cambio climático y la alta demanda en electromovilidad. Chile tiene las mayores reservas en ambos casos, por lo tanto, se pregunta ¿Qué falta?
Considera que es prioritario industrializar el litio, atrayendo inversiones con mayor valor agregado, un ejemplo: licitando mayor cuota, privilegiando aquellos inversionistas que se instalen con fábricas de baterías.
Enfatizó en aprovechar la bonaza de precios que tiene el mineral blanco de manera urgente. Agregó que producir productos elaborados de litio ya no es opción, sino una obligación para Chile. Y, resolver a la brevedad que los privados inviertan en litio.