Luis Albornoz, supervisor en Prevención de Riesgo del Área Mantenimiento Mina, Candelaria.
Luis lleva más de 20 años de cara al avance de la minería en temas de seguridad y prevención, donde el cuidado de las y los trabajadores, así como la producción cumplan su objetivo sin contratiempos.
A falta de una profesión, Luis Albornoz tiene dos: ingeniero civil en mina y también es ingeniero en prevención, sin cotar con varias especializaciones con las que cuenta a lo largo de sus 23 años en minería.
Luis, a raíz de su experiencia, ¿cómo ha evolucionado la seguridad en la minería?
Cuando comencé en minería, mis inicios fueron en la división Chuquicamata de Codelco, ahí trabajé en operaciones. Y, en relación al cargo que tengo hoy ligado a la seguridad, comparado con esos años cuando partí, no se veía mucho la prevención, existían pocas campañas en temas de seguridad. Sin embargo, el tema ha ido avanzando con los años.
Después estuve en la división Gabriela Mistral, ahí tuve la oportunidad de estar en el área de la Gerencia de Seguridad y Salud Ocupacional donde el tema era algo más robusto. Existía un programa de seguridad que nos invitaba a todos a ser partícipes de un ambiente seguro y, obviamente, conseguir que ningún trabajador y trabajadora se lesionara.
¿Por qué es importante la seguridad, debido a que constantemente se habla y se insiste en ella?
Lo que buscamos es que los trabajadores y trabajadoras vuelvan a sus hogares íntegros, que mientras estén en el trabajo desarrollen sus actividades en un ambiente seguro. Además, actualmente en el mercado nos miden desde afuera por temas de seguridad, debido a que ésta ha logrado un rol importante, primero por el cuidado de las personas, el buen desarrollo de las operaciones, y también desde el punto de vista económico que implica.
¿La tecnología ha ayudado a conseguir una mejor seguridad?
Sí. Dentro de los programas y herramientas en materia de seguridad, incluso, en algunas organizaciones la tecnología ha ido más allá con respecto a las metodologías existentes para realizar prevención. La investigación también es una herramienta cuando ocurre algún accidente. Además, se revisa lo que otros países están haciendo con nuevas metodologías en la materia.
¿Al final del día qué se siente cuando se logran los objetivos en prevención?
El desafío de seguridad está cada día donde lo que buscamos es tener “cero daños”. Cada adía uno se siente con el sentimiento de logro y haber aportado con un grano de arena para que nuestros trabajadores realicen sus labores en forma segura, y buscando a la vez una continuidad operacional segura. Para ello, son fundamentales los siguientes pilares como la supervisión que nosotros realizamos en terreno, la educación y el seguimiento con nuestros trabajadores.
¿Cómo ve la evolución de la seguridad en adelante?
Creo que vamos avanzando bien; tuvimos un año 2023 muy bueno en temas de seguridad y operaciones. Además, como Candelaria logramos la exitosa implementación y proceso de los FRM (Controles Críticos de Fatalidad). También destaco el proceso que tenemos con los supervisores de observadores de conducta para reforzar más aún el liderazgo y erradicación en terreno con respecto a las conductas riesgosas de nuestros trabajadores y trabajadoras.
Este año el gran desafío es la colaboración, el respeto y la excelencia en lo que hacemos, y alcanzar un mayor éxito de lo que fue el año pasado. Junto con ello, seguir revisando la sinergia con otros equipos de trabajo y otras organizaciones para ir optimizando la seguridad, siempre en colaboración con todas las entidades con las que nos relacionamos dentro de Candelaria, es decir, integración con los sindicatos, comité paritario, etc.
¿Recomendaciones?
Día a día nuestro objetivo es tener “cero daños”; que al terminar nuestras labores sea gratificante, buscando siempre el autocuidado en todo momento; que todas nuestras decisiones sean siempre en beneficio de nuestra seguridad y salud.